Ya está aquí la Navidad, y con ella las reuniones familiares, las compras, la luz, el color y los viajes. Muchas personas aprovechan las vacaciones que ofrece esta época del año para trasladarse a otros lugares, explorar nuevos rincones y conocer así una cultura navideña diferente a la propia. Y no hace falta ir demasiado lejos para encontrar destinos navideños perfectos. Enclaves de película donde recibir a Papá Noel o despedir el año que termina.
Hoy, nos llena de orgullo y satisfacción, traeros cuatro ciudades del continente europeo ideales para pasar estas fechas tan señaladas.
LONDRES
Un fin de año a orillas del Támesis con el London Eye de fondo es algo que todo ser humano debería vivir al menos una vez en la vida. El bullicio de la capital inglesa en plena Navidad es un estímulo para los sentidos. Camden Market, Notting Hill, Piccadilly Circus son algunos de los imprescindibles. Grandes y pequeños encontrarán sus rincones favoritos para disfrutar de un viaje muy especial.
BUDAPEST
Si Budapest es ya de por sí una de las ciudades más bellas del viejo continente, imagínatela engalanada para recibir a la Navidad. Su arquitectura deslumbrante, bañada por la majestuosidad del Danubio, ejerce un poder sobre la ciudad húngara totalmente irresistible. En tus planes estaba visitarla y este es el mejor momento. Sube al funicular del castillo de Buda y déjate impresionar, alucina también con edificios como el Parlamento y sí, haz un crucero por el río más famoso de Europa.
VIENA
Pocas ciudades albergan tanta magia como Viena, una urbe que rezuma arte por sus cuatro costados, un lugar exuberante donde convive lo antiguo y lo moderno. Ser cuna de la música clásica no hace más que reforzar el argumento de que estamos ante una ciudad única. Los más pequeños van a tener dos incentivos históricos en la capital austríaca, ni más ni menos que el zoo y la noria más antiguos del mundo. Buena repostería y los palacios barrocos más deslumbrantes, completan su oferta.
PRAGA
La “ciudad de las cien torres” te ofrece un doble viaje, ya que un simple paseo por el centro histórico te trasladará rápidamente a otra época. O épocas. Empápate de leyenda, de color y belleza arquitectónica en palacios, iglesias o jardines. No se nos ocurre escenario mejor para estos días. En el epicentro de la capital checa, la plaza de la Ciudad Vieja, encontrarás el mercadillo de Navidad más grande del país y uno de los más impresionantes que habrás visto jamás.
Tras estas cuatro recomendaciones solo nos queda desearte…
¡Buen viaje y felices fiestas!